Visitas Totales:

martes, 31 de julio de 2012

PATRIMONIO - HISTORIA - RELIQUIAS COLOMBIANAS.

barichara.jpg     BARICHARA



 san_juan_giron.jpg       SAN JUAN DE GIRÓN

honda1.jpg       HONDA   





salamina.jpg        SALAMINA

santa_cruz_monpox.jpg 
    SANTA CRUZ  -  MOMPOX



santa_cruz_lorica.jpg       SANTA CRUZ  -  LORICA



santafe_antioquia.jpg       SANTA FE DE ANTIOQUIA


Pueblos patrimonio de Colombia.
 Pueblos  bonitos de Colombia.

En Barichara el tiempo pasa lento. El ambiente tranquilo de sus calles, sus construcciones elaboradas cien por ciento en piedra y la tranquilidad de sus pobladores definen el carácter de este municipio fundado en 1702, donde hay silencio y se percibe seguridad.

La cultura de Barichara se centra en sus ancestros. Su historia forma parte del eje de la colonización y por eso sus habitantes hablan con orgullo de las grandes personalidades oriundas de la ciudad que han estado al frente de las decisiones importantes del país.

Sus 300  años se reflejan en una arquitectura imponente, donde la piedra es una constante en las casas, calles, centros religiosos y parques, y cuya conservación le hizo merecer el título de Monumento Nacional en 1978.

Los habitantes de Barichara lo definen como un 'pueblo fotogénico' y de gran potencial turístico, tanto para los que desean descansar como para los que aman la emoción y la aventura, que encuentra en la agreste topografía de los alrededores el escenario ideal para los deportes extremos o los recorridos al aire libre.

La cultura es la 'moneda' de Barichara

En Barichara los viejos tienen el conocimiento y los jóvenes lo reciben. Oficios como el cultivo de tabaco, las técnicas de construcción de origen, el trabajo en piedra, papel, cerámica o barro y los tejidos en lana y fique son transmitidos de generación en generación y son considerados el mayor legado de un pueblo que sigue viendo en ellos su futuro.

La variedad y calidad de la gastronomía también son motivo de orgullo para la región y el país. Los platos típicos son el cabro, la pepitoria, el mute santandereano, las carnes oreadas y por supuesto la hormiga Culona, una tradición alimentaria de 200 años en Santander.

Tres veces al año en Barichara se lleva a cabo el mercado campesino, en el que  ofrecen todos los productos locales y participa la comunicad en pleno.

Y si de celebrar se trata, no se escatima a la hora de organizar eventos de danza y música tradicional o conciertos de talla internacional que acompañan sus principales festividades.


Girón -  La 'ciudad blanca' está llena de historia

Un precioso lugar detenido en el tiempo. Sus calles empedradas y sus casas blancas hacen pensar en los comuneros y la lucha libertadora. 

Esta bella población de Santander es conocida como 'Ciudad blanca'. Y es así porque sus habitantes decidieron conservar las construcciones de tipo artesanal de la época colonial.

Disfrutar San Juan Girón, o simplemente Girón, es rehacer la historia libertadora y comunera.

Sus calles empedradas y su armoniosa arquitectura, con puentes de calicanto y faroles, convierten al visitante en un personaje de otras épocas.

Para muchos es el escenario perfecto para hacer volar la imaginación y viajar a un pasado marcado por la lucha, pero también por el trabajo laborioso de mujeres dedicadas a las artesanías elaboradas en barro, paja y tela, oficio que pasó de generación en generación y hoy es de incalculable valor.

'Villa de los Caballeros de Girón'

En Girón, o 'Villa de los Caballeros de Girón', el visitante puede contagiarse del fervor religioso de sus habitantes, el mismo que se expresa en sus festividades. Son conocidas las novenas de aguinaldo por su despliegue cultural y artístico, la fiesta del Corpus y la Semana Santa.

Admirar sus templos y espacios propicios para la meditación y la espiritualidad es el complemento ideal a este turismo religioso, que cada vez atrae a más visitantes que buscan un lugar sereno con mucha memoria.

La belleza arquitectónica de Girón se complementa con la hermosura de la naturaleza que lo rodea. Por ejemplo, está el Humedal del Pantano, un sitio ecoturístico considerado reserva natural. Se encuentra muy cerca de la quebrada La Angula, que abastece de agua al municipio de Lebrija.

Todos los sentidos se ponen a prueba en este lugar conservado gracias al interés de los gironeses.

Honda - La 'ciudad de los puentes'


Esta mágica población transporta a sus visitantes a épocas remotas. Esas en las que el transporte fluvial y ferroviario era el principal medio para llevar y traer alimentos, textiles y personas. El imponente Magdalena y su gente siguen atrayendo a turistas.

No en vano Honda es un pueblo patrimonio de Colombia. Su riqueza arquitectónica, cargada de identidad y de memoria, da cuenta de la historia e hitos importantes del desarrollo de nuestro país. El Magdalena, por el que transitaron mercaderes y expedicionarios, baña de sur a norte a esta bella ciudad, que también disfruta las aguas del río Gualí y la quebrada Seca.

Con tantos ríos cerca se entiende la vocación de los hondanos, que se enorgullecen de ser pescadores y conocer los secretos y encantos de su profesión. En 'El Carnaval de la Subienda", que se inicia en febrero con la llegada de gran cantidad de peces al Magdalena, extraños y propios disfrutan de las tradiciones populares tejidas durante años alrededor de este festín.

La culinaria es una de ellas y la plaza de mercado, el sitio ideal para degustar sus delicias. Este lugar está cargado de secretos y recuerdos. Fue el convento de los franciscanos y hoy es Monumento Nacional. Por su estilo la plaza es conocida en el departamento como 'El Partenón del Tolima'.

La historia, su mayor riqueza

Honda es una ciudad urbana, solo tiene ocho veredas y al contrario de otros municipios del Tolima su economía no está basada en la agricultura. 'La ciudad de los puentes', como se le conoce, tiene sus ingresos de la pesca, el turismo y la ganadería.

Cientos de personas la visitan para conocer sus casas coloniales y pensar cómo fue en épocas pasadas este próspero lugar que ha sido un referente de la economía del país. También van a la ciudad para recorrer sus calles, la más conocida la de Las Trampas, pasear por los puertos y disfrutar de los museos del Río y Alfonso López Pumarejo, llamado así en homenaje a quien fue presidente de Colombia en dos períodos y nació en ella.

Su nombre lo debe a que es excepcional el número de puentes que la atraviesan: 40 en total. El más famoso es el Puente Navarro por ser el primero en su género en Suramérica.

Entre sus riquezas históricas están petroglifos muy antiguos y construcciones que datan de la era precolombina, colonial y republicana, incluso algunas con referentes de arquitectura árabe. Cuenta además con cuatro teatros y una biblioteca. La plaza de mercado define el eje de su centro histórico y los sectores aledaños.

Por la ciudad transitan turistas y viajeros procedentes de diferentes zonas del país que pasan por sus tierras para dirigirse a Bogotá, Medellín, la costa Atlántica, el Eje Cafetero o el sur del territorio nacional. Por ello es considerada la estrella vial de Colombia.

Honda tiene, además de su tradición de transporte fluvial, una historia de ferrocarriles y de arrieros, quienes a lomo de mula acarrearon el café para comercializarlo. Por la ciudad pasó Mutis con su Expedición Botánica y muchos más que iban y venían a Cartagena para tomar camino al exterior.

La religiosidad es un rasgo que también ha caracterizado a los hondanos, tal como da cuenta la celebración de la Semana Santa, todo un referente en el país.

La playa de Belén - Un pesebre viviente a 45 minutos de Ocaña

Un pequeño poblado que recuerda a un pesebre y atrae por su paz, quietud y tranquilidad, pero, sobre todo, por su gigante amigo: el Parque Natural Los Estoraques, de cuatro millones de años.

La pasión por el descanso inspira a este prodigioso lugar de Norte de Santander, ubicado a 45 minutos de Ocaña, la segunda ciudad del departamento. El azul del cielo que lo abriga, la impactante quietud, la paz y el silencio son los mayores atractivos de este pueblo neocolonial, que para algunos parece un hermoso pesebre por el color blanco de sus casas que rodean un tesoro: Los Estoraques.

Hacia el cielo se levanta majestuoso este parque, toda una escultura hecha por la naturaleza y el tiempo. Imponente en su tamaño y noble en su belleza, Los Estoraques surcan el horizonte dibujando un paisaje único en su especie. Quien se deje cautivar por su gloriosa inmensidad tendrá un viaje por el tiempo de cuatro millones de años, cálculo que se tiene de su existencia.

La belleza de sus paisajes, conjugada con el silencio y la tranquilidad, le dan a La Playa de Belén un valor incalculable, significativo y motivante, que atrae a turistas extranjeros y nacionales. Los mismos que están ansiosos por encontrar un lugar en paz, alejado del bullicioso y el acelere de las grandes ciudades.

Un bello poblado'

La Playa de Belén encanta por su uniformidad. Todas las casas tienen,  además del blanco, una matera redonda marrón colgada a la entrada. Las tiendas y locales comerciarles tienen avisos o letreros hechos en bloques de madera, todos de la misma forma. A eso se agrega que el 70 por ciento de los playeros, como se les dice a los nacidos allí, tienen por apellido Arévalo o Claro.

Visitar La Playa de Belén en Navidad es una experiencia inolvidable porque no sólo permite disfrutar una sensación cultural mágica de la época, sino también sentir la fuerza de una comunidad convocada en torno a una fiesta religiosa, espiritual.

La religión es vital en esta población, como lo muestra un sinnúmero de fiestas creadas para rendir homenaje a santos y a la Virgen.

En Lorica se vive la buena vida

Esta bella ciudad cordobesa, junto al río Sinú, se complace en abrir sus puertas a los turistas. Los extranjeros han tenido cabida siempre en su territorio, como lo demuestran majestuosas edificaciones donde ellos dejaron su huella.

A un costado del bello paisaje del río Sinú encontramos a Lorica, una ciudad revestida por un importante pasado cultural que se vislumbra en sus grandes construcciones arquitectónicas.

Pobladores de origen e inmigrantes atraídos por estas ricas y prósperas tierras impusieron un sello único en maravillosas y bellas casas que se han mantenido a través de los años.

El río Sinú, que antes fue su motor comercial, hoy le da tranquilidad al poblado y brinda a los turistas un bello paisaje. Desde su nacimiento hasta su desembocadura se pueden realizar actividades náuticas, las cuales se complementan con recorridos para disfrutar de una gran variedad de fauna y flora propia de esta región. Los paseos por el río constituyen una verdadera aventura que termina en San Bernardo del Viento, una hermosa población.

Los extensos espejos de agua llenos de flora y fauna atraen a los turistas y a los artistas que encuentran en ellos la musa de su inspiración. Pinturas naturalistas, cerámicas y artesanías dan cuenta de ello.

Entre las artesanías el sombrero "vueltiao" es el más conocido. Es fabricado, desde tiempos atrás, por los indígenas de San Sebastián. También son famosas las vasijas de cerámicas, las pinturas naturalistas y las figuras elaboradas a mano con formas que simulan orígenes de excavaciones.

Un tesoro en Córdoba

Para los loriqueros, como se les conoce a los nacidos en este bello lugar, la música es un ingrediente importante de su cultura. En sus corregimientos, especialmente Carito, se pueden disfrutar de alegres certámenes de porro como el Festival Nacional de Porro de San Pelayo.

La comida es fundamental en esos festines y en general en la vida del pueblo. Se ve en la amplia y deliciosa oferta gastronómica y en la gran cantidad de festivales relacionados con los alimentos. La piña, el ñame, el maíz y el plátano, entre otros, tienen sus días de homenaje. En su menú también están  el sancocho de bocachico, el revoltillo de pescado desmenuzado y los patacones.

Mompox es ‘la ciudad museo’

La bella ciudad de Mompox, en Bolívar, ofrece al mundo su tradición. Sus pobladores se enorgullecen de sus costumbres que han transmitido de generación en generación.

Es la ciudad de los títulos: 'Monumento Nacional', 'Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad', 'Ciudad Valerosa', 'Ciudad Museo'. Esa es la bella Mompox, o Santa Cruz de Mompox, una población donde sonríe el sol. La misma que recuerda un pasado marcado por gente sevillana que habitó estas tierras y dejó su legado arquitectónico y cultural.

Casas blancas adornan sus calles por las que sopla el viento producido por las ondas del río Magdalena. Recorrer su casco histórico y pasar la mirada por sus joyas culturales y arquitectónicas es una experiencia única.

Desde el Puerto de la Bodega hasta Talaiguaviejo se puede disfrutar de las bellezas creadas por la mano del hombre y por la naturaleza como humedales, fauna silvestre y flora.

Quién no ha oído hablar y visto el trabajo impecable en filigrana y las artesanías que producen sus pobladores, o sus famosos tejidos que engalanan a quien los usa. La joyería en filigrana de plata y la orfebrería son verdaderos atractivos para los visitantes, quienes pueden conocer sus técnicas y procesos de fabricación.

La cultura tradicional es importante en este lugar que se enorgullece de mostrarla al mundo. Los cánticos populares cuentan historias relacionadas con ello y con la fascinación que sus habitantes sienten por esta población.

Un pasado vivo

Sus fiestas religiosas forman parte de ese tesoro histórico y cultural que ofrece Mompox. La celebración de la Semana Santa, un acto solemne, lleno de creatividad y espiritualidad, es de marcado interés para propios y extraños.

Igual sucede con su gastronomía. Platos de origen campesino, como la viuda, llamada también montañera, compuesta por yuca, suero y queso, o la viuda de suero, la carne salada, el cerdo salado, pescado salado, el quesito de capa, la butifarra, el chorizo, el dulce de limón y el dulce de borejero forman parte de su apetitosa carta.

La pesca es un renglón muy importante de la economía de la región momposina, como puede verse en el contenido de su oferta gastronómica.


Monguí - La ciudad en medio de un páramo

Monguí es un pueblo que abriga entre sus ruanas el más puro y sincero sentimiento de hospitalidad y gentileza hacia los demás. Un lugar cargado de historias de su pasado indígena y colonial relatado por sus caminos y sus maravillosas construcciones.

Esta bella y fría población ha sido reconocida como el pueblo más hermoso de Boyacá y de Colombia. Sus tranquilos alrededores, casas coloniales antiguas y calles empedradas lo han hecho merecedor de tan noble título.

El patrimonio cultural material, inmaterial y natural de Monguí es incalculable. El Páramo de Ocetá, ubicado en cercaníasa esta población, por ejemplo, es considerado uno de los páramos más hermosos del mundo y mejor conservados de Colombia, y sus construcciones en calicanto han ganado fama nacional e internacional.

Además de ello, tiene una riqueza de obras pictóricas de la Colonia que se conservan en el convento museo, entre ellas las obras del importante pintor de esa época: Gregorio Vásquez de Arce y Ceballos.

Monguí también tiene riquezas arqueológicas y pinturas rupestres, que enorgullecen a sus pobladores.

Como los enorgullece también su industria de balones. Allí se encuentran los mejores balones de fútbol del país y de otros deportes, elaborados en cuero. Las personas viajan cientos de kilómetros para comprarlos y de paso apreciar  la belleza de esta localidad que parece detenida en el tiempo.

Una población de tradición

Su ubicación hace que la temperatura máxima sea de 16,6 ºC, lo cual obliga a las personas a contrarrestar el frío con ruanas. Da la impresión de que este vestuario tradicional, una costumbre de los antepasados, fuera el símbolo de esta población habitada por gente fervorosa que celebra de manera constante fiestas religiosas.

Sus grupos de música tradicional, arte y danza folclórica hacen más solemnes y atractivas dichas fiestas, y además integran su oferta cultural de la que también forma parte la gastronomía.

El cultivo de verduras y tubérculos típicos de la región cundiboyacense le han permitido desarrollar sabores y olores diferentes en sus sopas y cocidos. De igual forma, el ganado bovino, todo un tesoro por su lana, le ha dado manjares que durante años, de generación en generación, ha ido cultivando.

Salamina - El pueblo de los parques

Un lugar en el que se conjuga la belleza de la naturaleza con la del trabajo del hombre. La arquitectura de Salamina es una muestra de la creatividad y laboriosidad de los salamineños.

Salamina posee una muestra arquitectónica de envidiable belleza, marcada por una estética que habla de la época colonial y de los legados traídos por sus colonizadores. Sus edificaciones y bellas casas, con balcones y flores, están llenas de contenidos históricos, de memoria viva.

Es un pueblo de parques: Parque Bolívar, Parque de la Madre, Parque de Los Poetas, Parque Fundadores, Parque de La Cuchilla, Parque de La Presentación, Parque infantil Los Amiguitos, Parque del Cementerio y el Parque de San Félix . Espacios diseñados para el deleite de grandes y chicos que desde épocas viejas destinan parte de su tiempo a contemplar la belleza de su población.

Como todas nuestras ciudades patrimoniales, Salamina tiene hitos religiosos que marcan referentes de gran interés turístico y cultural. Uno de ellos, muy conocido, es 'La Noche del Fuego' en la que 40 mil faroles son prendidos por los habitantes para celebrar el paso de la Virgen y dar así inicio a las fiestas de fin de año.

Un lugar con vocación

Este municipio, que parece detenido en el tiempo, se enorgullece de mostrar a sus visitantes verdaderas joyas naturales como el Bosque Natural Palma de Cera la Samaria, caídas de agua sobre rocas demuestran petroglifos y cuencas hídricas.

También muestra a propios y ajenos 'La ruta colonizadora', patrimonio histórico y cultural que ha conservado por años como un tesoro. Igual que su arquitectura de bahareque y tapia, impecable a pesar del paso del tiempo. Es tal su interés por preservar sus tradiciones que hoy cuenta con un proyecto especial para su desarrollo y conservación: la Escuela Taller de Artes y Oficios.

Una tarea similar realiza la Fundación Calicanto con el proyecto Artistas de la Montaña, quienes esperan recuperar los conocimientos dancísticos y musicales en el área rural de la población.

De esta manera, Salamina se presenta como un destino en el que se pueden combinar diferentes experiencias que serán inolvidables para quienes se dejen cautivar.

 Santa Fé de Antioquia -La 'ciudad madre' de Antioquia

Una población con tradición. Así es Santa Fe de Antioquia, la 'Ciudad madre' de este departamento que la quiere y la admira por su valor histórico y cultural.

Recorrer sus calles, visitar sus casas y apreciar sus museos es transportarse al pasado de Antioquia. Esta bella población colonial mantiene su legado lo que le ha permitido consolidarse como una tierra de alto nivel cultural y arquitectónico.

Uno de los valores centrales de Santa Fe de Antioquia está en la arquitectura colonial que define el marco de su centro histórico. Las casas alrededor, sus parques e iglesias determinan un entorno patrimonial envidiable. Y el Puente de Occidente, una verdadera obra de ingeniería, tiene un alto valor técnico por sus características. Es un referente histórico por su marcada importancia en el desarrollo de la región.

En la enumeración de sus elementos patrimoniales están las danzas tradicionales, el bunde, la candanga, la cría de mariposas y las frutas.

Como lo es para la mayoría de los pueblos relacionados con el café, este producto es parte de su vida cotidiana y del desarrollo de su cultura.

La primera ciudad

Sus habitantes están orgullosos de conservar los lugares que albergaron ilustres personajes y en los que sucedieron hechos que han escrito la historia del país. Sitios que hoy conservan la memoria del pueblo, algunos convertidos en museos donde el pasado glorioso se refleja en producciones artísticas, objetos y documentos que soportan la gran significación de esta ciudad.

En esta población no solo se vive la expresión de la cultura en sus edificaciones, también en sus tradiciones populares. Sus diversas fiestas se han mantenido durante el tiempo, como el bien más preciado.

En Santa Fe de Antioquia se denota una fuerza cultural muy importante que data de sus hitos históricos al haber sido la ciudad fundadora y capital del departamento de Antioquia. Está llena de códigos y referentes vivos, como  la presencia de familias de tradición que han gestado gran parte del desarrollo de la región y que hoy la conservan como el refugio y el espacio cultural por excelencia.

Tanto que hoy por hoy se han generado espacios para artistas contemporáneos que buscan en Santa Fe el lugar propicio para la investigación y la creación artística en diversos campos.

Villa de leyva - Un pueblo de vocación turística, cultural y ecológica.

Esta pequeña población detenida en el tiempo ofrece a sus visitantes una experiencia única en la que confluyen historia, cultura, naturaleza y arqueología.

Hay un sinnúmero de elementos que se pueden citar cuando se habla de Villa de Leyva, una ciudad fuertemente ligada a la historia del país, que cumplió 438 años y posee uno de los patrimonios paisajísticos más bellos y atractivos de Colombia.

El Centro histórico de Villa de Leyva es referente arquitectónico y espacio de encuentro con la cultura. Una población que desde hace muchos años definió su vocación turística y ha trabajado con rigor en la conservación de su patrimonio arquitectónico y sus expresiones culturales.

Cada rincón de este hermoso pueblo tiene una historia que contarnos. Allí el pasado está vivo como un sello de orgullo de sus habitantes quienes guardan toda la tradición cultural del ser boyacense expresada en su vestimenta, sus artesanías y su comida.

Es un lugar con una amplia gama de atractivos para cualquier tipo de gustos. Los amantes de la naturaleza cuentan con la posibilidad de visitar el Santuario de Iguaque, disfrutar de las aventuras que ofrece explorar cavernas o caminar por bellos paisajes.

Los que prefieren la historia pueden deleitarse con los recuerdos sobre nuestros próceres que habitaron y murieron en esta hermosa tierra o conocer las joyas dispuestas en sus museos. Y si el interés es arqueológico, los vestigios y restos de los seres que la habitaron hace millones de años resultan ser bastante interesantes.

Un museo viviente

Villa de Leyva es una ciudad dinámica que combina su pasado con el presente. Sus calles empedradas y su arquitectura colonial están al servicio de los turistas para que disfruten y gocen su estadía. Por ello este museo viviente ofrece distintos planes a sus visitantes, que incluyen estadía en grandes casas con historia, cabalgatas en la noche, música y una buena comida acompañada del mejor vino.

Las artesanías y los productos culturales, fabricados con materiales naturales propios de la región, dan cuenta de su gran fortaleza en este campo. Los visitantes los encuentran distribuidos en tiendas y espacios dispuestos para su disfrute lo cual además les permite recorrer las muestras a través de callejones y bellos centros comerciales que conservan el toque antiguo y autóctono de esta hermosa población.

Presentado por: Ornella Castaño Ortiz .


MIRADAS AL MUNDO DESDE LA VISIÓN DE LA JUVENTUD


Estudios con proyección internacional

Investigaciones universitarias colombianas han sido destacadas en varias organizaciones mundiales.


Mucho se ha insistido en Colombia acerca de la necesidad de hacer más inversión para estimular la investigación, con el fin de que esta sea el soporte de la innovación y se convierta en uno de los principales motores de las locomotoras del desarrollo del país. Por eso, desde enero pasado, este presupuesto cuenta con un billón de pesos adicional, que es administrado por el Departamento Administrativo de Ciencia, Tecnología e Innovación, Colciencias.
Este último ente ha procurado que estos nuevos recursos estén destinados a macroproyectos regionales, que no solo ayuden a proyectar determinadas zonas, de acuerdo con sus necesidades, sino que además sirvan para que poco a poco el país tenga mayor protagonismo en la región y el mundo.
Esto, sumado al interés creciente de las universidades, hace que, cada vez más, los estudios hechos por diferentes instituciones de educación superior colombianas tomen mayor relevancia y se proyecten en el ámbito nacional e internacional. Estos son algunos de esos ejemplos que sobresalen y jalonan el interés, tanto de nuevos investigadores como de diferentes instituciones estatales y privadas.
Con 'materia' colombiana
El Grupo de investigación en altas energías, liderado por Marta Losada, rectora de la Universidad Antonio Nariño, es uno de los dos equipos colombianos que hacen parte de la investigación de la Organización Europea para la Investigación Nuclear (Cern).
Desde hace seis años se creó esta agrupación con la firme intención de ser colaboradores en el experimento Atlas, uno de los dos proyectos del Gran Colisionador de Hadrones (HLC); en la que hace apenas unos días dieron el anuncio de que existe alta probabilidad de que se haya encontrado la partícula de Higgs, última pieza que faltaría descubrir en el Modelo Estándar.
Cada uno de los cinco integrantes cumple una función específica para contribuir a esa investigación y desde laboratorios ubicados en la universidad monitorean toda la información emitida desde Europa.
Esto aporta a la formación de profesionales colombianos, pues la Institución orienta cursos y seminarios para difundir estos conocimientos.
Carlos Sandoval hace parte del grupo.
Con alto vuelo
ANÁLISIS QUE BENEFICIA ECOSISTEMAS
Elkin Tenorio tiene 24 años, es de Villavicencio y su interés siempre ha sido saber cómo se originan las especies y cómo el contexto en el que viven contribuye para su formación.

Es así como en su tesis de maestría, en Ciencias Biológicas de la Universidad de los Andes, y por su formación como biólogo en la U. del Valle, decidió emprender una investigación con la que compara los ecosistemas de los Andes con los amazónicos, con el fin de analizar cómo el clima, la temperatura y hasta los mismos ríos influyen en la conformación de las especies, puntualmente en las aves, su grupo de estudio. 

Este trabajo, dirigido por el profesor Carlos Daniel Cadena, fue premiado por la Infraestructura Mundial de Información sobre Biodiversidad (Global Biodiversity Information Facility (Gbif)), quien escogió la idea como una de las dos ganadoras de la beca Premio a Jóvenes Investigadores, que entrega esa organización mundial, con una financiación de 4.000 euros.
El proyecto "Evaluación
El implementación de procesos avanzados de oxidación para la depuración de aguas residuales con alta carga contaminante", de la Universidad Libre, busca implementar desarrollos tecnológicos con el fin de depurar los residuos que deja la industria litográfica.  

Con este se han logrado remociones significativas en los contaminantes producidos por estas industrias, y los resultados han sido difundidos en diferentes congresos como el 43rd World Chemistry Congress de la IUPAC del 2011 y el 16th International Conference on TiO2 Photocatalysis. 


En Colombia sobra el talento pero faltan emprendedores


La mayor parte de los universitarios busca un empleo estable y olvida el valor de crear empresa.
Que los jóvenes colombianos tienen una enorme creatividad es algo que pocos ponen en duda. El problema es que no van más allá.
De hecho, dicen expertos, la mayor parte de los universitarios a punto de graduarse tienen como meta obtener un empleo que garantice estabilidad y, si hay suerte, una sólida carrera. Todo eso en la empresa de otros, pero muy pocas veces en una propia.
Para José Manuel Restrepo, rector del Colegio de Estudios Superiores de Administración (Cesa), la explicación está en que los jóvenes colombianos carecen de capacidad de riesgo, de apuesta. Además, dice, son pocas las universidades que forman y apoyan a emprendedores.
En eso coincide Francisco Javier Matiz, director del Programa Emprendedor de la universidad EAN, para quien la situación va en contravía de una tendencia mundial de jóvenes que buscan marcar la diferencia con apuestas innovadoras. "¿Por qué nosotros no?", se pregunta.
Pese al panorama, Matiz tiene una visión un poco más positiva respecto a la responsabilidad de la academia. "Hace un par de años, el concepto de formar en emprendimiento empezó a llamar la atención en el sector de la educación superior, y prueba de ello es la creación de la Red de Emprendimiento Universitario (Reúne), que en Bogotá congrega a más de 40 universidades". A eso se suma la Ley 1014 de 2006, que dispuso la obligatoriedad de promover en los colegios programas de formación en competencias emprendedoras.
Infortunadamente, esto aún no se ha llevado a la práctica: "El país tiene talento humano sobresaliente, pero las estrategias que propician su desarrollo funcionan aún de forma desarticulada", afirma Restrepo, el rector del Cesa.
Y es que si en algo coinciden los expertos es que esta habilidad, que puede desarrollarse en cualquier persona, no se aprende con un par de cursos o clases, pero sí con práctica. "A emprender se enseña emprendiendo", dice enfático Matiz.
Una buena oportunidad
Cuando se trata de un negocio, por ejemplo, el primer paso consiste en identificar una buena oportunidad y generar una propuesta de valor a través de productos o servicios innovadores. Hecho eso, hay que formular un modelo de negocio que incluya la elaboración de un estudio de mercado y un análisis financiero y de presupuesto. Por último, hay que poner manos a la obra y materializar la empresa.
Esto suele hacerse de la mano con emprendedores de la vida real, de empresarios que orientan y acompañan a los jóvenes en sus iniciativas.