EL RESTAURANTE ESCOLAR ABRIÓ SUS PUERTAS

Por Camilo J. Ropero

Después de varios meses de haber sido terminada la obra de construcción de la planta física, y que el mismo alcalde Yebrail Haddad Linero hubiera hecho entrega de la misma, el restaurante escolar se puso en funcionamiento para brindar su servicio gratuito a todos los estudiantes de la institución. Muchos nos preguntábamos el porqué existiendo ya un lugar establecido  el servicio, no había comenzado a ofrecerse inmediatamente después de la entrega del espacio. Incluso se llegó a pensar de que se pondría ponerse en funcionamiento para el próximo año.

Faltando más o menos cien días hábiles para el cese de actividades académicas, por fin el restaurante escolar abrió sus puertas el 20 de septiembre a las 12 meridiano. Pese a que aún no se han instalados las mesas para tomar el almuerzo como debe ser, los estudiantes se la han ingeniado para acomodarse en los alrededores y disfrutar de estos.

El servicio en estos primeros días ha tenido buena acogida, observándose largas filas de más de media hora, con un promedio de 60 o más estudiantes por día. La comunidad beneficiada ha expresado su conformidad con la atención, despacho y calidad de los almuerzos. «Creo que hoy se merece repetir», frecuentan decir algunos estudiantes después de terminar sus platos. Por lo tanto,  rumores que decían que en los restaurantes escolares de la ciudad se servían «refrigerios», quedó desmentido al comprobar que la ración de comida es lo bastante suficiente.

Los inconvenientes que se han presentado hasta el momento, son la indisciplina y el desorden generalizado en las extensas filas de estudiantes que esperan su turno. Pero creo que es necesario que los estudiantes hagan conciencia de la importancia de establecer un relativo orden, que mejore el ambiente de espera y la haga menos fatigante.

Pese a que en el colegio no se han visto casos de esta índole, se ha advertido a los estudiantes que utilizan el servicio, que dispongan bien de el, sobre todo evitando el despilfarro de comida, pues así se evitará sanciones a la institución o la posibilidad del cierre del restaurante.

Es de esperar que el servicio mantenga la buena calidad que hasta el momento ha mostrado, que la institución brinde las facultades necesarios para su sostenimiento, incluyendo una constante revisión de sanitad alimentaria, y claro está, que nosotros lo estudiantes también demos de nuestra parte para que este servicio nuestro perdure.

Fotografías: Juan F. Quintero