TLC
entre Colombia y EE.UU. enciende alarma entre productores
El tratado de libre comercio (TLC) suscrito en 2006 entre Estados Unidos
y Colombia entra en vigor este martes con la esperanza del gobierno colombiano
de que potenciará la economía, pero también con el temor entre sectores
agrícolas y el rechazo de los trabajadores sindicalizados.
El gobierno del presidente Juan Manuel Santos tiene una visión
optimista: que el TLC con Estados Unidos, el principal socio comercial de
Colombia, generará medio millón de empleos formales en cinco años y aumentará
en un punto porcentual el Producto Interno Bruto (PIB), que en 2011 creció
5,9%.
"Es una oportunidad de oro, pues en el entorno suramericano el país que más comercio tiene con Estados Unidos es Colombia", resaltó el ministro de Comercio, Industria y Turismo, Sergio Díaz-Granados. Las exportaciones de Colombia a Estados Unidos fueron de 21.705,2 millones de dólares en 2011 y las importaciones de 13.593,5 millones de dólares.
Colombia colocó en el mercado estadounidense el 36,8% de su oferta
exportable el año pasado.
EL ARROZ COLOMBIANO, AMENAZADO
El presidente de la Asociación de exportadores (Analdex), Javier Díaz,
se congratuló porque "finalmente se logró tener un contrato firmado con el
principal cliente de Colombia que le garantiza a los empresarios reglas de
juego permanentes y seguridad jurídica", aunque no prevé "cambios
extraordinarios" a corto plazo.
"Estamos compitiendo con muchos países, como México, Perú y Chile, que ya tienen tratados con Estados Unidos", explicó.
Pese a que Díaz cree que la mayoría de los productores se beneficiarán
con el tratado, reconoció que hay sectores sensibles como los del arroz, maíz,
avícola y lácteo "que no tenían competencia".
Sobre ello, el presidente de la Federación de arroceros (Fedearroz),
Rafael Hernández, sostuvo que "va a causar traumas el ingreso de arroz de
Estados Unidos a menor precio del colombiano por los subsidios que tiene".
Hernández apuntó que cerca de medio millón de familias dependen de ese
producto y previó una reducción en las 450.000 hectáreas cultivadas.
LA REACCIÓN DE LOS PRODUCTORES
Los productores avícolas calculan que con la entrada en vigor del TLC,
ingresarán 27.000 toneladas anuales de cuartos traseros de pollos de Estados
Unidos sin pagar aranceles (2,5% del total de la producción del país).
La privada Asociación de Procesadores de Leche (Asoleche) también teme la competencia de un sector altamente subsidiado en Estados Unidos, y alerta que saldrían del mercado unos 400.000 pequeños productores.
El gobierno asegura que los productos que obtendrán mayores ventajas son la floricultura, textiles, confecciones, farmacéuticos y químicos, plásticos, caucho, grasas, azúcares, chocolates y galletas, metales preciosos y joyería, instrumentos de óptica, musicales, maderas y muebles.
Pero para aumentar sus ventas, Colombia tendrá como obstáculo importante
un retraso de 20 años en la adecuación de la infraestructura vial y portuaria,
advirtió el presidente de Analdex.
Esa situación hace que los costos de la operación de un contenedor sean
casi cuatro veces más altos que en Panamá, señaló Saúl Pineda, director del
Centro del Pensamiento para la Competitividad de la Universidad del Rosario,
tras señalar que ese país pondrá en octubre en vigor un TLC con Estados Unidos.
¿Y LOS DERECHOS LABORALES?
La Central Unitaria de Trabajadores (CUT) cuestiona que "los tratados de libre comercio afectan especialmente a los obreros en la industria y el agro y no se dan en términos de igualdad", aseguró su presidente Domingo Tovar.
De acuerdo con la CUT, 30 sindicalistas fueron asesinados en Colombia en
2011 y otros 7 en lo que va de este año. Sólo 4% de los trabajadores
colombianos está sindicalizado.
En este contexto, la cuenta pendiente sigue siendo el respeto a los
derechos laborales y sindicales en Colombia. Las violaciones a esos derechos
retrasaron por casi seis años la aprobación definitiva del TLC, que requirió de
un compromiso de los presidentes Barack Obama y Juan Manuel Santos para mejorar
esos índices.
Pero según centrales sindicales de Colombia y de Estados Unidos, el
alcance de las medidas tomadas en el último año "ha sido muy limitado (y)
no se resolvió ninguna de las graves violaciones de las libertades sindicales".
Por : Ornella castaño
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